Guerras Santas

Las cruzadas fueron actos denominados a la recuperación de Tierra Santa por parte de los cristianos europeos, buscaban quitar el poder que tenía el pueblo turco en dicho lugar. La religión generó el debilitamiento de los señores feudales frente a la monarquía, estos actos generaron grandes consecuencias e impactos durante los siguientes siglos. Las cruzadas aparte de buscar liberación se establecieron como un instrumento de la política eclesiástica.

 Las cruzadas surgieron en Europa, específicamente en Francia, fundamentadas en una conciencia misionera del cristianismo de Occidente, en defensa propia de algunos pueblos de Europa, dentro de este se buscaba fortalecer la importancia de la religión y el papado. Dichos actos se veían como un objetivo acorde a sus ideales morales y religiosos, los cristianos buscaban la liberación de Tierra Santa y la difusión de la fe.

El objetivo de “liberación”, o mejor dicho de conquista a Jerusalén hizo que la nobleza occidental abandonara de forma efectiva algunas luchas internas y se centrara netamente en esta guerra exterior. Un aparatado del evangelio, “El que quiera seguirme, niéguese a si mismo, tome su cruz y que me siga”, influyo en la generación de un movimiento de masas, con esto dichas personas decían que era un “seguimiento de corazón a Dios”, viendo esto como un acto de pasión hacia Cristo.

Empieza la cruzada hacia Jerusalén donde se forman ejércitos concientizados para la recuperación del territorio que está en manos del pueblo turco, se genera matanza a judíos de forma espontánea e inconsciente, poniendo de manifiesto la falta de un plan determinante la invasión que lo cristianos buscaban, así mismo la falta de concepción y liderazgo definido. La mortalidad de los musulmanes iba en ascenso, cada vez había más sangre derramada.

Después de varios enfrentamientos entre los pueblos se generó la conquista de Jerusalén el 14 de julio de 1099. Los príncipes europeos querían que Godofredo de Bouillón fuera el soberano de Jerusalén. Esto genero entusiasmo religioso y varios cantos de celebración por parte de los cristianos. Tras la muerte de Bouillón, Bauldinio de Edesa se proclamó rey de Jerusalén (1.100-1.118), la empresa de la cruzada delegó al papado como director de la Cristiandad Oriental.

Tras segundos fracasos se empezaron a escuchar voces de crítica hacia las cruzadas, algunas personas las dejaban de ver como un propósito de salvación y lo empezaban a ver como un fin político y religioso, la idea de cruzada se desacreditó. La caída de Jerusalén desencadeno la tercera cruzada, la reconquista de dicho lugar se convirtió en un objetivo clave del pontificado de Inocencio III. Enemistades entre los caballeros de Occidente desunían dichos grupos de cristianos, generando luchas internas y así mismo dificultando la reconquista de Jerusalén, este cayó en manos musulmanes en 1244. Las órdenes militares cada día se incrementaban basándose en diversos propósitos.

En conclusión, observamos como los objetivos de liberación y recuperación fueron cambiando al pasar de los días, volviendo las cruzadas un instrumento de política religiosa que se utilizaban contra todo aquel que iba no compartía los preceptos de la iglesia. La “Guerra Santa” ratificó la importancia del cristianismo en el mundo, cada día se marcaban las diferencias y la rivalidad entre dicha religión y el islamismo, trayendo consecuencias que hoy en día evidenciamos. La manipulación fue causal del derramamiento de sangre, la unión de diferentes ideologías y de la ambición humana.